El aprendizaje móvil (mobile learning) y la realidad aumentada permiten el aprendizaje personalizado pues los contenidos en 3D facilitan la enseñanza y reforzar conceptos. Permite la motivación, y un escenario formativo motivador, colaborativo e interactivo, ayudando a una educación más abierta y creativa.
Las actividades de realidad aumentada pueden incorporarse fácilmente a metodologías activas tales como flipped classroom (clase invertida), gamificación, aprendizaje basado en problemas y aprendizaje basado en proyectos, entre otros.